- Detrás del macrocomplejo de casinos y hoteles Eurovegas se esconde una trama desalentadora.
- Las negociaciones de este proyecto avanzan.
- Alcorcón (Madrid) ha sido el lugar elegido para su construcción.
La
utilización de medios y funciones por parte de los gestores públicos
en su propio interés económico o de otra índole, se define como
corrupción.
Eurovegas
es el proyecto de levantamiento de un apoteósico complejo formado
por seis casinos, doce hoteles, diez rascacielos, nueve teatros, tres
campos de golf, etc. Su construcción sería progresiva, aderezada
con la lentitud clásica española, pudiéndose incrementar el riesgo
de abandono del proyecto.
¿Necesita
España una Eurovegas?
Con
el beneplácito de la Comunidad
de Madrid,
Sheldon Adelson
tiene la posibilidad de expandir su imperio, formado, hasta ahora,
por nueve complejos turísticos en EEUU, Macao y Singapur. El
gobierno autonómico, con los nuevos cambios legislativos, actúa
como mero mandatario de una empresa transnacional.
Si
no leyeron antes, Adelson es el magnate estadounidense, presidente y
director de operaciones de la multinacional Las
Vegas Sands Corporation.
***
La
cuestión que se nos plantea es Eurovegas sí, o, Eurovegas no.
Introduzcámonos en un escenario político e identifiquemos a los
actores que exigen una serie de derechos
fundamentales,
además de unos entes privados y otros públicos. Para ello
partiremos de las siguientes dos premisas:
1ª
Todo el mundo tiene derecho a elegir su propio destino.
2ª
La neutralidad en los juicios (morales, políticos o jurídicos) de
cada individuo es crucial para prevenir la injusticia en el modo de
proceder. En otras palabras, no puede haber parcialidad en el juicio
porque conlleva un designio anticipado. (Esto no significa que no
debamos tomar parte en la cuestión, de lo que se trata es de
observar y analizar, en la medida de lo posible, la cuestión con
imparcialidad).
Desde
la plataforma ciudadana “Detengamos
Eurovegas Alcorcón”
se
denuncian una serie de imposiciones, esto es, unas decisiones de
carácter vinculante. Estas
decisiones adquieren forma de ley, y por ello, deben ser respetadas
por la ciudadanía.
No obstante, la ciudadanía está descontenta por tener que atenerse
a las consecuencias de esas decisiones, tomadas por sus
“representantes”.
Lo
que resalta la oposición al proyecto es la falta de un informe
público sobre la viabilidad económica. También la dudosa promesa
de generación de empleo.
Además
de la carencia de información, la ciudadanía de Alcorcón denuncia
la privación de tener voz en el asunto. Ésto no es extraño después
de que en los plenos municipales se le haya impedido preguntar por la
destrucción de empleo,-después de los recortes en servicios
públicos, a través de la reforma laboral del gobierno-, de parte
de quienes prometen miles de empleos en Eurovegas.
El día ocho de febrero en Madrid
se pudo oír el ruido, a golpe de cacerola, causado por un río de
personas. El veintitrés de ese mismo mes, se multiplicaron los ríos
en una convergencia de mareas ciudadanas concertada en la Plaza
Neptuno. Enfrente del Congreso de los Diputados.
En
tanto en cuanto a la financiación del proyecto no
existen garantías ni en la primera fase de la construcción.
Desde la oposición se califica al proyecto como “estafa” porque
se percibe un acuerdo particular con una empresa privada, LVS.
Este
punto de vista enfoca a Eurovegas como la expresión de la batalla
empresarial, política y legal que produce la lógica individual de
querer maximizar el beneficio sin límites.
Identificamos
como ente privado la compañía multinacional dirigida por un
particular, Sheldon Adelson. Este individuo es un experto en
optimizar sus recursos para reducir costes y poder así acumular
capital. Tiene el decimosexto puesto en el ranking de grandes
fortunas mundiales. Sus actividades
en China están siendo investigadas después
de que Steve Jacobs, exdirector ejecutivo de Sands China, le
denunciara por incumplimiento del contrato. Éste alegó que fue
despedido por enfrentarse reiteradamente a Adelson por sus
“peticiones ilegales”. Tiene abiertos procesos, inciados por la
Comisión de Bolsa y Valores, el Departamento de Justicia de EEUU, y
el Consejo de Control de Juego de Nevada a raíz de la mencionada
denuncia, según el periódico
El Economista.
Más aun, el diario estadounidense The
Wall Street Journal,
LVS
admitió su “probable” vulneración de la ley estadounidense que
prohíbe los sobornos a funcionarios extranjeros.
Para
terminar, enmarcamos a los entes públicos, específicamente a los
individuos que ejercen cargos públicos en la Comunidad de Madrid y
que tienen cierto poder de decisión en la cuestión.
Al
consejero de Economía y Hacienda,
Enrique
Ossorio,
no le gusta “absolutamente
nada”
que LVS esté siendo procesado por irregularidades en sus
actividades. Opina que "es
un tema que tienen que investigar las autoridades de Estados Unidos".
David
Pérez,
el
alcalde de Alcorcón
, afirma
"ninguna organización, por desgracia, y más una gran
multinacional que abre tantos centros en tantos sitios, está a salvo
de que puedan pasar cosas de esas".
Salvador
Victoria,
el
portavoz de la Comunidad,
se preocupó por alejar el tema de la construcción de Eurovegas de
los vestigios de posibles sobornos en Asia:
"Esto es una cuestión que afecta a los organismos de control
americanos y a la propia empresa en Estados Unidos”
porque es algo "ajeno
a lo que pueda ocurrir aquí".
Una
hora más tarde, Ignacio
González,
el presidente
de la Comunidad de Madrid añadirá
un mensaje pirueta en el que defiende el proyecto Eurovegas y lo
enaltece equiparándolo al proyecto de los JJOO Madrid 2020. El
núcleo del mensaje contiene que son "proyectos
de revitalización”,
utilizando un lenguaje económico, pues se supone que nos ayudarán
a crear empleo y a salir de la crisis, "por
mucho que algunos quieran interponer chinitas en el camino".
Eurovegas
es una cuestión que concierne a parte del pueblo
de forma directa (la ciudadanía de Alcorcón), e indirectamente al
resto de ciudadanos de los diferentes territorios del Estado. La
respuesta por parte de la Comunidad de Madrid han sido unas leyes
que aumentan la desafección ciudadana ante la política, y la
sensación de distanciamiento entre representantes y representados.
¿Qué
implican estos cambios legislativos? En primer lugar, los cargos
públicos a los que les compete la tarea de expropiar el terreno del
Norte de Alcorcón pueden ofrecer un precio de zona rural, más
barato. La Ley de Presupuestos Generales de Estado 2013 y la Ley
Medidas Fiscales y Administrativas de la Comunidad de Madrid proceden
a asegurar la inversión de empresas privadas como LVS.
Los
colectivos ciudadanos son silenciados
por aquellos que detentan la praxis del poder político. Los
representantes de la ciudadanía no tienen ni capacidad reflexiva, ni
legislativa, ni directiva, ni tampoco, y sobretodo, representativa.
Estos “representantes” se agrupan en partidos políticos que
funcionan en un sistema que establece una legitimidad democrática a
través de unas elecciones, que requieren una serie de garantías
para ser válidas.
Constitucionalmente
es
el
pueblo
el
que detenta la soberanía nacional y la delega en sus representantes.
Como consecuencia, el entramado estatal puede disfrutar del
monopolio de creación del Derecho. A la figura institucional que
encarna al pueblo, Soledad
Becerril,
la Constitución le otorga unas funciones y unas competencias como
Defensor
del Pueblo.
Se trata de un sujeto jurídico, una persona, que ha tratado la
cuestión porque le compete. Su actividad es fundamental en el
ejercicio democrático, supervisa a la Administración Pública para
evitar irregularidades. Soledad Becerril se ha pronunciado sobre la
cuestión, apuntando la
opacidad del proyecto por la escasa información que ofrece la
Comunidad de Madrid
sobre Eurovegas, instando
a la Administración a ser transparente.
En
conclusión, en tanto que la cuestión no concede la capacidad de
maniobra a los individuos a los que les afecta de forma negativa,
directa o indirectamente, se han constituido en una comunidad virtual
que se ha personificado en las manifestaciones. Podemos afirmar que
hay colectivos que consideran que las medidas del gobierno devalúan
su dignidad como personas, afectando así a sus derechos
fundamentales constitucionalmente recogidos. Aquellos que defienden
el proyecto, y que tienen el poder de decisión sobre la cuestión,
construyen un discurso político que rechaza diálogo alguno y avanza
por su idea de “salir de la crisis”.
“La gran solución al gran problema de la crisis es el Megaproyecto
Eurovegas”, dijo
sarcásticamente el politólogo Juan Carlos Monedero.
Parece una frase de eslogan.
En cuanto a la segunda
premisa, deberíamos preguntarnos si ciertos cargos públicos
responden a la misma lógica que mueve a Sheldon Adelson, y por qué
ocupan esos cargos.
Dauldee
Mairim
0 comentarios:
Publicar un comentario